En 1847 tuvo lugar una de las mayores guerras internas de México. La llamada Guerra de Casta en donde blancos y meztizos lucharon entre sÃ. Las personas que vivÃan en Valladolid empezaron a migrar para encontrar un nuevo hogar u huir de la guerra. ​
Cuando llegaron a la localidad de Sabán, recibieron el aviso de que los mayas se encontraban muy cerca por lo que buscaron refugio en la iglesia donde fueron atacados con machetes y cuchillos de gran longitud, por un grupo de mayas comandado por Cecilio Chi. Muchos murieron en el ataque. Entre los heridos estaba un joven llamado Casimiro Cárdenas. Estaba cubierto de sangre con un pequeño crucifijo en la mano que él creÃa que le salvó la vida. Esto ahora se conoce como el Milagro de Sabán.
En el momento después de que recobró la conciencia, se hizo la promesa sagrada que sà alguna vez llegarán a un lugar seguro y se establecierán para el resto de sus vidas, todos los años, realizarÃan un servicio solemne en honor a la Santa Cruz. Los sobrevivientes del ataque continuarón su viaje para llegar finalmente a la Isla de Cozumel. Entre ellos se encontraba el joven Casimiro Cárdenas. Un año más tarde, un segundo grupo de personas, la mayorÃa de ellos de origen maya, llegó a la isla y fundó el poblado de El Cedral sobre las ruinas mayas llamadas Oycib. Oycib ha sido renombrado como Santa MarÃa en 1527 por los españoles. Casimiro Cárdenas tomó la decisión de mudarse con su grupo y vivir en la nueva comunidad de El Cedral. ​ Las festividades religiosas comienzan el 23 de abril con las primeras oraciones del amanecer. Estos son seguidos con novenas, nueve dÃas consecutivos de oraciones, que terminan el 3 de mayo con la danza solemne de la cabeza de cerdo. ésto es ofrecido a Dios como un sacrificio, como se sacrificó él en la cruz. Para los mayas que viven aquà la música y la danza es,a su vez, energÃa que se le da al sol ya la luna, Ixchel, que les proporcione la energÃa para continuar su obra divina.